Desde la Red Nacional de Territorios Creativos conversamos con Pablo Witker y Fernanda Rodríguez, consultores y gestores con un profundo vínculo con la cultura, las artes, la economía creativa y el fomento productivo, quienes nos detallan el panorama actual de la economía creativa en la Región de Ñuble.
Fábrica Creativa en Ñuble marcó un hito este año: ¿Qué ha ocurrido en la región en términos de economía creativa desde entonces?
Fernanda Rodríguez: Desde la realización de Fábrica Creativa hemos entrado en un intenso periodo de postulación y formulación de proyectos. Este impulso ha permitido la creación y el fortalecimiento de redes cruciales entre los distintos actores del ecosistema.
Pablo Witker: Ñuble es una región que tiene solo siete años de existencia y lo que estamos viendo son proyectos de largo aliento que ejecutan los organismos públicos y que están ocurriendo en paralelo. Entre ellos, los proyectos de la Comisión Bicentenario de la Municipalidad de Chillán con obras que decantarán en 2035; así como en 2039, con el centenario del terremoto. Se trabaja una visión de ciudad a largo plazo.
El Gobierno regional impulsa el Plan Ñuble 250, con una mirada estratégica amplia que incluye diversas obras públicas en tres ejes: las energías limpias, la cultura y la infraestructura social. La estrategia regional de desarrrollo incorporó formalmente a las industrias creativas. Esto se concretará a través de instrumentos de fomento de CORFO y SERCOTEC.
Además, existe un instrumento de internacionalización para industrias creativas a través del Comité de Desarrollo Productivo, un organismo con incidencia autónoma, gracias a la Ley de Gobiernos Regionales. Ñuble, junto a Valparaíso y La Araucanía, es una de las regiones donde esto tiene mayor Incidencia.
¿Qué proyectos específicos están impulsando actualmente?
F.R.: Estamos ejecutando un Viraliza Eventos de CORFO, Confluencia, encuentro nacional e internacional de emprendimiento e industria musical, y está proyectado para llevarse a cabo en abril de 2026.
P.W.: También estamos en la postulación de la ciudad a la Red de Ciudades Creativas de la UNESCO. Estamos en el proceso de decisión de la estrategia de postulación, acompañados de una asesoría internacional con foco en experiencias de México, Colombia y Brasil.
Además, estamos en un proyecto audiovisual para promover el enoturismo en el Valle del Itata, orientado al mercado brasileño. Se está desarrollando con fondos FNDR del GORE, con la productora de cine diezcincuenta.
F.R.: Colaboramos también con el Valle Las Trancas, apoyando el nuevo proyecto de barrios comerciales y en la elaboración de una publicación sobre la historia local, ambiental y turística del Valle Las Trancas, con financiamiento público FNDR.
A nivel privado, buscamos fortalecer los lazos con el sector gastronómico y con al menos dos organizaciones sin fines de lucro del ámbito cultural.
¿De qué manera la economía creativa ha logrado posicionarse como un tema relevante en la región?
F.R.: El Programa Territorial Integrado (PTI) fue clave para posicionar la industria creativa como un tema central. Ser socios de la Red Nacional de Territorios Creativos y estar conectados con ecosistemas como Valpo Creativo, Frutillar Ciudad Creativa y Valdivia Territorio Creativo, abre miradas.
También fue vital la Fábrica de Ñuble, que nos permitió traer speakers con miradas disruptivas, como Paula Trujillo, que habló sobre la transformación de una ciudad, o Claudia Pereira de Somos Fuego Music, quien evaluó el Festival REC.
P.W.: En Chillán y Ñuble existe una serie de condiciones ambientales clave para el ecosistema creativo. Y esto no sería posible sin las instituciones emblemáticas del ecosistema: la cultura, el arte, el patrimonio, las escuelas artísticas; ellas son una base sólida sobre la que se construye el siguiente escalón.
F.R.: Una evidencia reciente es la entrega de los Fondos del 8% del Gobierno Regional. La cantidad de beneficiarios del mundo de la cultura fue muy grande, incluyendo municipalidades, liceos y asociaciones gremiales.
P.W.: Exacto. Eso evidencia que la economía creativa no es solo un grupo; está permeando en distintas partes.
¿Qué oportunidades y desafíos vislumbran para el futuro cercano de Ñuble Creativo?
F.R.: La mayor oportunidad es la voluntad de las autoridades e instituciones para el financiamiento y seguir levantando iniciativas. Hay que valorar y empoderar al conjunto de actores que están aprovechando esta ventana de oportunidades.
P.W.: La economía creativa permite diversificar la matriz productiva regional.
F.R.: En el ámbito de los desafíos, vemos la necesidad de vincular de forma más estrecha a la academia y a los medios de comunicación. Necesitamos que se sumen como agentes activos en la difusión y formación.
P.W.: Y un desafío cultural: que la ciudad se reconozca como un lugar entretenido. Necesitamos que la gente se atreva a pasarlo bien con la música, con la pintura, y que la propia región se «crea más el cuento» de su potencial creativo, que hay nuevos actores… gente rara, que se peina y usa ropa de manera distinta.
Texto: María José Hess Paz
Créditos de las fotografías Valle Las Trancas y Valle del Itata: Sernatur
Créditos de las fotografías Fernanda y Pablo: gentileza Fernanda y Pablo
Crédito fotografía principal: Ministerio de Culturas, las Artes y el Patrimonio.